Me encanta trabajar con padres adolescentes. Creo que siempre he tenido un interés especial en esta población ya que obviamente en algún momento de mi vida fui una adolescente. Siendo latina y el poder decirles “Se exactamente a lo que te refieres, te comprendo perfectamente” es algo que hace que nuestra conexión sea más fuerte. La recompensa en si es la relación que establezco con mis pacientes. Se siente bien saber que les he impactado o influenciado en su vida de alguna manera.
Eileen Roberta, Trabajadora Social, Programa de padres jóvenes
Debemos tener en cuenta todos los sacrificios que hacen estas familias para llegar aquí. Lo han hecho por sus hijos obviamente, pero es un gran sacrificio. Así es que creo que cuando vemos al niño ya sano y recuperado y jugando y haciendo todas las cosas normales de un niño de esa edad. Estar contentos de que hemos ofrecido algo que quizás ese niño no tenía en su país. Eso nos da una gran gratificación. Yo creo que no solamente yo, pero toda la gente que maneja este tipo de problemas, esa es la razón por la que lo hace.
Dr. Pedro Del Nido, Jefe de cirugía cardiaca
Los niños que tienen situaciones médicas que van a estar aquí toda su vida, nos han dicho que el hospital es como su familia. A veces no te acuerdas de cada caso, pero si tu estas con ellos en un periodo difícil…ellos si lo recordaran siempre. Eso es muy gratificante para nosotros.
Maria Carvalho, Trabajadora Social Clínica Del Equipo De Habla Hispana
Cuando veo a una familia que ha llegado de cero y han luchado y los veo después como están bien, eso me da una alegría muy grande. O niños que los habían desahuciado y eso veo caminando como si nada hubiese pasado. La gratitud que uno recibe por las familias…por nada, porque a veces tú no haces mucho y la gratitud es algo muy bello. Es más de lo que he aprendido de ellos de lo que ellos de mí. Trabajar con los pacientes hispanos me ha dado muchas cosas positivas
Cecilia Matos, Coordinadora, Hale Centro de Familias
Las familias latinas son muy agradables y muchas veces hasta divertidas y nos reímos todos en el momento de la consulta con las cosas que dicen. Tienen mucho respeto por la ayuda que reciben aquí. Son muy agradecidos y lo dejan saber. Desde que comencé a trabajar aquí me ha fascinado, el trabajo que hago aquí es incomparable. A pesar de que muchas veces estamos corriendo, siempre al final la satisfacción es inmensa por que aprendemos mucho.
Lucia Gonzalez, Intérprete médico
Yo he visto familias que regresan años después y todavía recuerdan que ellos encontraron ese aliciente en su momento debido. Que fueron apoyados, a pesar de estar con un niño hospitalizado. Así es que esa gran satisfacción que ellos expresan, de haberse sentido bien de nosotros haber hecho algo muy significativo, nos llena de alegría.
Olga Perez, Trabajadora Social Clínica Del Equipo De Habla Hispana
Las recompensas son que los latinos de por si somos optimistas, al mal tiempo buena cara. Aunque tengamos un momento malo, tenemos fe. Nuestras familias tienen mucha fe. La fe mueve montañas. Aquí yo he visto familias sobreponerse a los retos más grandes que yo he visto y la fe que tienen sobrepasa todo.
Eva Gomez, Enfermera, Especialista en desarrollo profesional
La parte del agradecimiento del paciente hispano deja mucho beneplácito cuando uno los trata. La experiencia personal, conocer de que país vienen, que es lo que los trajo aquí y cuáles son sus expectativas. Cuando los pacientes mejoran y participan es una cosa fantástica. La mejor recompensa es ver a los niños que he tratado que han mejorado y se han adaptado e incorporado a su vida regular. Eso es lo más bonito de la pediatría. Eso lo levanta a uno, ver al paciente crecer y desarrollarse.
Creo que como inmigrantes tenemos la ventaja de poder navegar en las dos culturas, no solo en el idioma, si no la manera de reaccionar con el paciente. Inmediatamente hay una conexión con el paciente de habla hispana y hay una confianza. El paciente hispano siente ese orgullo que tiene un médico que es hispano y está trabajando con él.
Dr. Alejandro Flores, Gastroenterólogo Pediatra
Las familias de habla hispana son como tu familia, especialmente las que llego a conocer bien. Es bonito saber que tengo la profesión de ser enfermera y ademas tengo la ventaja de poder darles informacion y educarlos en su propio idioma. Eso les ayuda a que se sientan mucho mas comodos a pesar de estar en un ambiente nuevo. El simple hecho de saber que ellos sienten la confianza de hacerme las preguntas que quieran, porque saben que pueden comunicarse libremente en su idioma sin preocuparse si les entienden o no es realmente gratificante.
Sasha Grullon, Enfermera, Unidad de aislamiento: Trasplante de médula
En el área de cirugía cardiaca, antes de la operación generalmente nos preguntan: “¿Cuántas operaciones hay que hacer? ¿Cuánto tiempo va a demorar el proceso?” Los padres pueden ser sobreprotectores así es que quieren saber instrucciones muy específicas acerca del cuidado post operatorio que deben tener con sus hijos.
Sumei Portugues, Gerente de acceso a pacientes internacionales, Cirugía Cardiaca
Rewards
I love working with our teen parents. I think that I have always had an interest in this population, since I was obviously once a teen. Being Latina, and being able to say “I know exactly where you are coming from” “I can relate” is something that makes our connection stronger. The reward is really the relationship I can get from these teenagers. It feels great knowing that I have impacted them in one some way or the other.
Eileen Roberta, Social Worker, Young Parents Program
We should keep in mind all the sacrifices these families have made to make it here. They have obviously done it for their kids, but nonetheless it is a sacrifice. So when we see a child that is healthy again and is playing and doing all the things he/she should be doing at his/her age…we are pleased to have been able to give him/her something that they probably wouldn’t have gotten in their country. That is a great reward. I think that is why everyone who manages cases like these does it.
Pedro Del Nido, MD, Chief of Cardiac Surgery
Spanish speaking families are very grateful, and that just makes you feel good when you work with them. Learning more about them, what country they are from, what brought them here and what their expectations are is amazing. The greatest reward is seeing children that I treated who are healthy again and are back to living their normal life. That is the most beautiful thing about pediatrics. When you see your patients grow and develop, it lifts up your spirit.
As immigrants, we have the advantage of navigating both cultures, not just the language. We know how to react with the patient and there is an immediate connection with them. The Hispanic patient is proud of having a Hispanic doctor working with them.
Alejandro Flores, MD, Gastroenterology Hepatology Nutrition
The greatest rewards are when I get to see a family that came to this country and had to start from scratch, and is now doing great, I feel so proud and happy for them. Or when I see kids who were told they wouldn’t make it in their native country and are now walking around as if they had never been sick. The gratitude that families express towards you, even when you feel that you didn’t do much for them, they really are grateful. I think that I have learned more from them than they have learned from me. Working with Spanish speaking families has given me so many positive things.
Cecilia Matos, Program Coordinator, Hale Center for Families
I think that the rewards are that Spanish speaking patients are optimistic. Even if we are going through really hard times, we have faith. Faith can move mountains and our families have a lot of faith. I have witnessed families overcome the biggest challenges I have ever seen just because they never lose faith.
Eva Gomez, RN, Professional Development Specialist
Children that have severe medical conditions and will have to receive treatment here at this hospital for life, have told us that the hospital is like their family. You don’t always remember every single case you see, but if you are helping them during tough times, they will remember you forever. That is the most rewarding thing.
Maria Carvalho, Clinical Social Worker, Spanish Team
It feels like Spanish speaking families are family, especially for the ones that I am very close to. It’s nice being a nurse and being able to speak their native language, because I have my lever of education as a nurse and provider but I can go that next step and give them that information in their native language and that helps them in their comfort level when they are in a new setting. Knowing that they open up to ask questions with me, because they know that they can speak freely in their language and not worry about someone not understanding them is gratifying.
Sasha Grullon, Staff Nurse I, Bone Marrow Transplant Isolation Unit
I have seen families who come back after many years and they still remember that in hat time of need, they found the support they were looking for. I think that is the greatest reward, knowing that they felt that we really were able to help them in a special way. That fills us with joy.
Olga Perez, Clinical Social Worker, Spanish Team
Language can be a barrier, but since I speak their language, I can help them. I can comfort them when they are overwhelmed and come to ask me questions. Spanish speaking families are very loving, kind and thankful. They have so many things going on during their time at the hospital that all you can try to do is make them feel at ease during this process. Sometimes I will get a call or an email from a family that has already been discharged and I get scared, like “what happened?” But nothing really happened, they are just want to thank you for everything you did for them. That is gratifying. That is when you know that you really made a difference.
Sumei Portugues, Global Patient Access Manager, Cardiovascular Surgery